E-E-A-T… ¿Otro nuevo acrónimo? No del todo, porque hace más de un año que este concepto se dio a conocer, sin hacer olas, en diciembre de 2022. Al no ser un factor de clasificación para los sitios web, muchos lo ignoraron. ¡Y eso es un error! Porque si entiendes este concepto y lo aplicas a tu estrategia de contenidos, tendrás más posibilidades de clasificarte mejor que tus competidores en los resultados de búsqueda.
Entonces, ¿qué es este E-E-A-T? ¿Para qué sirve y cómo puedes mejorarlo? ¡Te lo contamos todo!
¿Qué es este concepto de Google E-E-A-T?
En Google hay “robots”, o “Google bots”. Son los que escanean las páginas de cada sitio web y luego las muestran en los resultados de búsqueda tras una consulta. Pero no las muestran al azar. Tienen en cuenta muchos criterios, como la calidad, confianza y relevancia del contenido.
Aquí es donde entran en juego los “humanos” de Google. Porque sí, hay humanos en Google. Son los Quality Raters o los “Evaluadores de Calidad” en español. Equipados con el Search Quality Essentials -una especie de biblia de Google que determina, basándose en una serie de factores, si un texto es la mejor respuesta a una búsqueda concreta-, estos humanos prueban los sitios y les dan una puntuación global (de menor a mayor) que determinará su clasificación.
E-E-A-T es uno de los factores que se tienen en cuenta para la clasificación. Y no es del todo nuevo: ¡el E-A-T habría celebrado su 10º aniversario este año si Google no hubiera decidido añadir una E para ponerte las cosas más difíciles! Veamos que hay detrás de este acrónimo:
- E (Experience) significa experiencia, y este es el nuevo chico del salón;
- E (Expertise) por expertise;
- A (Authoritativeness) para autoridad;
- T (Trust) para confianza.
Ahora estarás pensando que, en realidad, es bastante sencillo. Basta con que tu sitio sea un poco antiguo para mostrar a Google que tienes experiencia y que tus productos son autoridades en la materia para que tu sitio se posicione inmediatamente bien. Pues no, porque todo depende de la experiencia del creador del contenido y de su propia expertise. En cuanto a la autoridad y la confianza, se aplican tanto al creador del contenido (un escritor, por ejemplo), como al contenido en sí (texto, vídeo…) y al sitio web. Así es como funciona:
E de Experiencia: depende de ti demostrar tus habilidades
Contrariamente a lo que mucha gente cree, lo que está en juego no es la experiencia del usuario que navega por la web, sino la del autor del contenido. Si tomo este artículo como ejemplo, Google (y sus Quality Raters) comprobarán si, como SEO, ya he escrito textos sobre este tema y si tengo una experiencia personal real y sólida en este campo (conociendo las directrices proporcionadas por Google, por ejemplo).
Si una persona quiere viajar a Australia, es más probable que confíe en alguien que realmente ha estado allí y comparte su experiencia que en alguien que nunca ha puesto un pie allí. Pues bien, esto se aplica a todos los ámbitos y a todos los productos. Demuestra tu experiencia personal por todos los medios, lo que sabes y lo que has aprendido se ha convertido en un criterio esencial para demostrar a Google que eres digno de confianza.
E de Expertise: demuestra que eres un experto
Puede que haya poca diferencia entre esto y la experiencia, porque aquí también estamos hablando de la expertise del autor. Tomemos de nuevo el ejemplo de este artículo. Soy SEO desde hace más de 15 años. Así que es justo decir que tengo cierta experiencia en SEO y que controlo regularmente temas relacionados con mi negocio, como el SEO. Pero si mañana escribo un artículo sobre cómo cambiar una correa de transmisión, seguro que te cuesta creerme (y tendrías razón).
Tendré que recurrir a verdaderos expertos en mecánica y a fuentes fiables (entrevistas, referencias, colaboraciones, etc.) para que mi contenido sea creíble a los ojos de Google y, por supuesto, a los tuyos.
A de Autoridad: ser reconocido por tus colegas y más allá
Ser un experto está muy bien. Pero ser un experto (o una marca) citado como ejemplo es aún mejor. La autoridad es la reputación, credibilidad e influencia de tu sitio en Google. Para una marca, significa aparecer en la posición 0 cuando se escribe su nombre en Google. Para un sitio de comercio electrónico, un sitio corporativo o incluso un blog, es lo mismo. Pero no siempre es fácil conseguirlo, sobre todo si trabajas en un sector competitivo.
Tienes que trabajar tu reputación e influencia. Si tu sitio se menciona a menudo, sobre todo en las redes sociales, si tiene un gran número de backlinks cualificados, si tus artículos se comparten muy seguido, entonces tú (o tu sitio) eres una verdadera figura de autoridad y estás al alcance de la posición cero.
T de Confianza: necesitas inspirar confianza
En una época en la que lo fake está en todas partes (deepfake, fake news…), la confianza es con mucho el criterio más importante para el E-E-A-T, que quiere destacar la honestidad, transparencia, fiabilidad y exactitud de la información proporcionada. El concepto de confianza combina varios valores en uno.
Según el sitio, algunos factores tendrán más peso que otros. Una tienda en línea debe tener un sistema de pago seguro, opiniones auténticas de los clientes y un servicio de atención al cliente con el que sea fácil ponerse en contacto. Para un negocio local, su sitio (o su tarjeta de visita) debe indicar una dirección física y un horario de apertura actualizado, porque eso es lo que buscan las personas. Cuanto más confianza inspires, más importancia te dará Google.
¿Por qué es tan importante el E-E-A-T para tu SEO?
Es cierto, el concepto de E-E-A-T no es un factor de clasificación que puedas optimizar para obtener mejores referencias, como la velocidad de carga de tus páginas, una indexación deficiente, etc. Pero es uno de los indicadores que utilizan los Quality Raters de Google para clasificar manualmente la calidad de los resultados de búsqueda. Google utilizará entonces sus observaciones para afinar su algoritmo y proponer clasificaciones cada vez más pertinentes. Si sabes de antemano lo que quieren los Quality Raters, puedes dárselo: “contenido útil, fiable y orientado a las personas” (en palabras de Google).
Como siempre, Google no te dará su receta para llegar siempre a lo más alto de los resultados de búsqueda, pero te dará algunas indicaciones. Es un poco como cocinar un plato del que conoces algunos (pero no todos) los ingredientes, pero no se dan las proporciones. Si crees que es más probable que el plato salga bien si lo cocinas a fuego lento durante mucho tiempo, ¡también puedes evitar asarlo a fuego fuerte en 10 minutos! Así que si Google te dice que E-E-A-T es importante, ¡escucha!
¿Cómo puedes utilizar el concepto E-E-A-T para mejorar tus contenidos?
Publica contenidos claros y de alta calidad
Calidad antes que cantidad… Este consejo ya era válido hace 10 ó 15 años y lo seguirá siendo dentro de 10 ó 15 años, si Internet sigue existiendo. Tu contenido debe contener información fiable y con fuentes. Tus lectores (o clientes) quieren una respuesta clara, comprensible y adaptada a sus necesidades. Investiga a fondo antes de escribir, explica las abreviaturas que utilices o si hay términos técnicos. Y si se necesitan más explicaciones, recurre a expertos para que te ilustren a ti y a tus lectores. Al final de tu artículo, la persona debería haber aprendido algo.
Cuida también la maquetación (títulos, subtítulos, párrafos). No mientas al lector. Si tus lectores sólo buscan información sobre un producto, dales información, pero no les mandes a una ficha de producto para que compren cuando no es eso lo que quieren. No escribas titulares para “cebarles” con un contenido que no es coherente, a Google no le gusta eso (y a las personas aún menos).
Inspira confianza sin ocultar nada
Antes que redactor web o propietario de un sitio web, probablemente también seas internauta. Entonces, ¿qué es lo primero que buscas en un sitio? ¿Qué te tranquiliza? Probablemente una página o pestaña sobre la empresa (su historia, las personas que la componen, fotos para que sepas con quién estás tratando), una dirección física para asegurarte de que realmente existe, una forma de contactarse (teléfono, correo electrónico, formulario de contacto), premios o certificaciones, enlaces a sus redes sociales, avisos legales claros, opiniones de clientes verificadas, enlaces a sitios de confianza, una FAQ…? Aplica entonces a tu sitio lo que buscas en otros sitios. Sé perfectamente transparente.
Fomenta las asociaciones
Ser un experto reconocido en tu campo está muy bien. Pero seguro que no eres el único que trabaja en tu sector. Así que invita a otros expertos a tu sitio, y permíteles que compartan sus experiencias y opiniones. Pueden complementar las tuyas y enriquecer tu sitio. Esto podría implicar entrevistas o colaboraciones como el guest blogging (publicar un artículo escrito por otro experto). En este caso, recuerda incluir un enlace a las redes sociales (o al sitio web) del autor para demostrar a Google que también es una autoridad en su campo, además de inspirar confianza al lector.
Céntrate en la seguridad
La seguridad de los datos es un tema importante. Debes tranquilizar a los internautas sobre este tema incluyendo páginas de “Política de Privacidad”, “Condiciones Generales” o “Condiciones Generales de Venta” si vendes online. En este caso, el proceso de pago debe ser, por supuesto, totalmente seguro.
El uso del protocolo HTTPS (y no sólo http), un certificado SSL válido y, por último, pero no por ello menos importante, las actualizaciones de los plugins de tu sitio también son esenciales si quieres evitar cualquier fallo de seguridad, y tranquilizar así a los internautas.
Limpia tu contenido y mantenlo actualizado
¿Quién no se ha encontrado alguna vez con una ficha de producto de un artículo que ya no existe, o ha ido a una tienda en la que por fin han cambiado los horarios de apertura? Las personas buscan información fiable Y actualizada. Así que tienes que actualizar tus contenidos e información con regularidad -en función de tu sector de actividad- para evitar decepcionarles. Por ejemplo, si trabajas y publicas contenidos en el sector de la construcción y la edificación, comprueba que las normas o leyes que mencionas son las más recientes.
Piensa en las opiniones de los clientes
Antes de hacer una compra, recurrir a una empresa o ir a un restaurante, las personas siempre miran las opiniones de los clientes, leen artículos comparativos o ven vídeos de prueba. Si un cliente está satisfecho, puede convertirse en un muy buen prescriptor. Google es muy sensible a las opiniones de los clientes, sobre todo si son positivas, porque inspiran confianza y demuestran la calidad de tus servicios.
Así que piensa en pedir a tus clientes que dejen una reseña de tus productos o servicios en plataformas reconocidas como Trustpilot, por ejemplo, o directamente en tu página de empresa de Google (que obviamente debe estar actualizada). No olvides las redes sociales, pregunta a tus clientes y responde cuando te envíen mensajes. Y no ignores las críticas negativas. Responde de la forma más justa posible.
Esto demostrará a Google que la satisfacción del cliente es importante para ti.